Quedan pocos días para llegar a mayo y seguimos con las mismas temperaturas de las pasadas vacaciones. El verano definitivamente se ha alargado y para qué ilusionarse con las añoradas precipitaciones, si esa palabra ya es inusual para todos en Chile.
Un clima que no cambia, y que si continúa de la misma forma, provocará una gran sequía que perjudicará a muchos sectores del país.
Esto mismo es lo que ocurre hace ya algunos años en la televisión chilena. Una programación pobre, con poco contenido y variedades para distintos gusto y edades. Pero lo que más preocupa es la desaparición de programas educativos para los niños, que como las precipitaciones escasean hace ya, bastante tiempo.
Al despertar cada mañana, es cosa de prender el televisor o abrir un diario para enterarse que ocurrió en el reality 1810, cuál fue el último escándalo en la farándula, o cómo va la pelea entre las teleseries.
Pero ¿Qué pasó con la parrilla programática de cada canal televisivo?, ¿Por qué uno de los canales más antiguos y exitosos, como lo es canal 13, centra su contenido mayoritariamente en un reality, Los Simpson y el área dramática, para entretener a su audiencia?
Es claro que la televisión finalmente es un negocio y que como tal, lo que les interesa, es obtener ganancias. Por esto prefieren no arriesgarse con propuestas nuevas, o tratar de aumentar la cultura o educación en sus contenidos, sino que priorizan los contenidos de mayor repercusión en el people meter, es decir, la televisión basura.
A pesar de saber muy bien que para gran parte de la población son un ejemplo y un modelo que muchas veces las personas imitan, no hacen nada para mejorar y aumentar los contenidos de sus parrillas programáticas. ¿Dónde quedaron los programas que entretenían y educaban al mismo tiempo a niños y grandes?
Años atrás era de gran importancia el espacio infantil para los canales y las horas dedicadas a esta programación era amplia. Quién no recuerda al "Profesor Rossa y Guru-Guru" y sus clásicos videos de animales, el simpático "Pin-Pon", "Topo Gigio", "Pipiripao", entre muchos otros. Emisiones que al mismo tiempo ayudaban a la construcción valórica de lo menores de edad.
Actualmente en los canales de la TV abierta se exhibe en su gran mayoría, dibujos animados con altos niveles de violencia, lo que según estudios comprobados, genera actos similares en los niños que presencian estas imágenes en la pantalla. Entonces ¿qué es lo que la televisión chilena está enseñando al futuro del país?
Es un panorama lamentable el que se ve actualmente y a futuro en la televisión, con excesos de violencia, farándula, y "dramones", sin darle los contenidos que realmente importan y se necesitan hoy.
Si esta sequía continúa de la misma manera con la actual escasez de lluvia de contenidos, no nos ilusionemos con cosechar frutos ricos en cultura y valores.
Un clima que no cambia, y que si continúa de la misma forma, provocará una gran sequía que perjudicará a muchos sectores del país.
Esto mismo es lo que ocurre hace ya algunos años en la televisión chilena. Una programación pobre, con poco contenido y variedades para distintos gusto y edades. Pero lo que más preocupa es la desaparición de programas educativos para los niños, que como las precipitaciones escasean hace ya, bastante tiempo.
Al despertar cada mañana, es cosa de prender el televisor o abrir un diario para enterarse que ocurrió en el reality 1810, cuál fue el último escándalo en la farándula, o cómo va la pelea entre las teleseries.
Pero ¿Qué pasó con la parrilla programática de cada canal televisivo?, ¿Por qué uno de los canales más antiguos y exitosos, como lo es canal 13, centra su contenido mayoritariamente en un reality, Los Simpson y el área dramática, para entretener a su audiencia?
Es claro que la televisión finalmente es un negocio y que como tal, lo que les interesa, es obtener ganancias. Por esto prefieren no arriesgarse con propuestas nuevas, o tratar de aumentar la cultura o educación en sus contenidos, sino que priorizan los contenidos de mayor repercusión en el people meter, es decir, la televisión basura.
A pesar de saber muy bien que para gran parte de la población son un ejemplo y un modelo que muchas veces las personas imitan, no hacen nada para mejorar y aumentar los contenidos de sus parrillas programáticas. ¿Dónde quedaron los programas que entretenían y educaban al mismo tiempo a niños y grandes?
Años atrás era de gran importancia el espacio infantil para los canales y las horas dedicadas a esta programación era amplia. Quién no recuerda al "Profesor Rossa y Guru-Guru" y sus clásicos videos de animales, el simpático "Pin-Pon", "Topo Gigio", "Pipiripao", entre muchos otros. Emisiones que al mismo tiempo ayudaban a la construcción valórica de lo menores de edad.
Actualmente en los canales de la TV abierta se exhibe en su gran mayoría, dibujos animados con altos niveles de violencia, lo que según estudios comprobados, genera actos similares en los niños que presencian estas imágenes en la pantalla. Entonces ¿qué es lo que la televisión chilena está enseñando al futuro del país?
Es un panorama lamentable el que se ve actualmente y a futuro en la televisión, con excesos de violencia, farándula, y "dramones", sin darle los contenidos que realmente importan y se necesitan hoy.
Si esta sequía continúa de la misma manera con la actual escasez de lluvia de contenidos, no nos ilusionemos con cosechar frutos ricos en cultura y valores.
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